No tengo patria Vivo dentro de las palabras envueltas en negro y cautivas Mustapha Khayati, ¿me estás oyendo? En la lengua reside el poder donde patrulla de policía ¡Basta ya de círculos poéticos! ¡Basta ya de poetas laureados! En mi barrio los poetas vírgenes se sacrifican Raperos de ojos sucios y pantalones anchos imponen rimas a los niños que esnifan palabras Caerse y volverse a levantar: el arte del poeta Jean Genet, ¿me estás oyendo? Mis palabras carecen de hogar duermen en los bancos de la plaza cubiertas de cartones del IKEA Mis palabras no resuenan en las noticias hacen la calle cada noche Mis palabras son proletarias, esclavas como yo Trabajan en talleres clandestinos día y noche No quiero más lamentos No quiero más verbos pertenecientes a los no combatientes Necesito un lenguaje nuevo, no proxeneta Estoy esperando una revolución que me invente Anhelo el lenguaje de la lucha de clases Un lenguaje que ha probado la insurgencia ¡Lo construiré! Ah, ¡qué arrogancia! Está bien, me voy Pero mira: en mi rostro se vislumbra el amanecer de una nueva poesía Ninguna palabra se quedará atrás, cautiva Estoy buscando un nuevo pasaje.
Traducción: Adriana Alcina Gomez